Esta vez os traigo unos ricos canalones, sencillos rápidos y buenos. Hace tiempo que no hacia, así que he aprovechado y he hecho cantidad y así tengo en el congelador para cuando quiera echar mano de ellos.
Ingredientes
350 gr. De ternera.
350 gr. De magra de cerdo.
250 gr. De pechuga de pollo.
200 gr. De rovellones o otras setas que nos gusten.
1 Lata de pate de 80 gr.
1 Cebolla.
2 Diente de ajo.
2 Cucharadas de tomate.
1/2 Vaso de vino rancio (añojo).
Sal y pimienta.
Aceite.
Para la bechamel, leche, harina y nuez moscada mantequilla y aceite.
50 gr. De setas secas remojadas.
Queso rallado para gratinar.
2 Paquetes de canalones kikiriki jajaja
Preparación
Primero de todo preparamos toda la carne cortada en cuandritos no muy grandes, los rovellones por separado limpios y cortados pequeños, la cebolla también picada y los ajos en laminas.
Empezamos poniendo en una olla tres cucharadas de aceite y cuando este caliente echamos las carnes y las vamos dorando hasta que cojan un bonito color dorado. Entonces salpimentamos y añadimos el vino rancio y dejamos reducir, pasados 2 a 3 minutos echamos 1 ajo y la cebolla picada, y el tomate y dejamos hacer poco a poco.
Mientras en una sarten ponemos un poco de aceite y el ajo restante, le damos un poco de color y echamos los rovellones, salpimentamos y les damos unas vueltas para seguidamente añadirlos a las carnes y dejar que acaben de hacerse todo junto, si hiciera falta añadimos un poco de agua o de caldo, pero que no nos quede seco.
Una vez acabado de hacer, añadimos el pate y lo trituramos todo junto, si hace falta añadimos un chorrito de leche pero con cuidado, ya que nos ha de quedar un triturado cremoso, para poder rellenar bien los canalones.
Lo metemos en una manga pastelera y reservamos.
Cogemos una olla con abundante agua con sal y un chorro de aceite, cuando rompa a hervir echamos canalones, pero no todos juntos para evitar que se nos rompan, mientras vamos removiendo.
Preparamos un bol con agua fría y cuando estén los sacamos al agua fría, y así vamos haciendo con todos. Una vez refrescados, los vamos poniendo sobre un trapo de algodón que deje pelos.
Una vez acabada esta operación, pasamos a rellenar los canalones, los vamos colocando en las fuentes elegidas que puedan ir al horno.
Hacemos una bechamel con los ingredientes, expuestos arriba, y salseamos los canalones, echamos el queso rallado y a gratinar los necesarios.